Danza Macabra

Zombicide: Black Plague – Aventura 0

Muerte, injusticia, enfermedad y guerra; son males que proliferan por doquier en éstos tiempos. Mas nada nos había preparado para una invasión de… ¡zombis!

Emergieron de las profundidades de los bosques, a través de la niebla, controlados por nigromantes que señalaban con sus huesudos dedos a las aldeas y granjas de la región designándolas como objetivos. Los zombis cayeron sobre nosotros como un enjambre de insectos, mordiendo, desgarrando y despedazando a los aldeanos. Y no pudimos más que observar horrorizados cómo nuestros amigos muertos se levantaban para engrosar las filas de los cadáveres ambulantes.

La invasión pudo haber triunfado, propagando el caos y la muerte hasta llegar a suponer una amenaza para las grandes ciudades: ni siquiera sus inexpugnables murallas habrían resistido la acometida de un formidable ejército de no muertos. Pero los nigromantes no contaban con nosotros. El pueblo llano, Los campesinos.

Los nigromantes han sucumbido al mismo orgullo desmedido que ya propiciara la caída de nuestros «ilustres soberanos». Han olvidado que somos duros. Que jamás nos rendimos. Y que sabemos cómo luchar. Los brujos nos han tomado por mera carnaza para reponer sus tropas.

Se equivocan.

¡Ha llegado la hora de tomar las armas para luchar por nuestras vidas y nuestra libertad! ¡Ha llegado la hora del Zombicidio!

La guerra no es ninguna novedad para nosotros. Nuestros condes y duques siempre están luchando entre ellos. Normalmente para los campesinos esto sólo supone un cambio en los impuestos y en los arrendamientos; eso si sobreviven. Pero esta vez el duque y su ejército partieron y nunca más se supo de ellos. Bueno, hasta que apareció la horda. Estoy segurísimo que muchos de los más resistentes eran soldados suyos. Ahora reina el caos más absoluto. Todos somos iguales, todos nos enfrentamos juntos a la danza macabra. Cuando los muertos llaman a tu puerta, no es momento de andarse con distinciones sociales. Luchamos codo con codo y plantamos cara a la muerte.

Nuestro mago es un buen ejemplo. Antes pertenecía a la élite de los ricos, poderosos e influyentes. Ahora es uno más y se aferra a la vida con uñas y dientes. Tiene un círculo mágico que puede transportarnos lejos de aquí. Huir para luchar otro día es preferible a quedarnos aquí hasta que nos devoren. Pero aún podrían quedar algunos pobres e infelices a los que rescatar, y además nos vendría bien encontrar algunas armas. El mago mantendrá el círculo abierto hasta el último momento. Es un buen tipo, ahora que ya no nos mira por encima del hombro.

Introducción a la partida

Danza Macabra

Debemos huir a toda costa, atravesando edificios repletos de no muertos hasta llegar al círculo de teletransporte del mago.

Partida tutorial.

Esta primera partida está pensada para habituarse a las reglas, que no son complicadas, y al sistema de juego en si. Aprendes a prever movimientos y ataques enemigos dentro de lo posible porque siempre hay un componente de aleatoriedad que te da esa sorpresita y cambia toda tu estrategia.

Empezamos en zona de calle. Tenemos un edificio con una puerta rota con la llave azul para ir avanzando, así que lo que hice es despejar al zombi de enfrente y meter a todos los que podía a buscar dentro para abastecernos de armas y coger la llavecita.

Ann y Nelly en su primer combate.

Ahora que todo está más tranquilo podemos registrar el edificio contiguo que tiene la puerta arrancada. Con precaución lo exploramos y encontramos varios objetos útiles. Samson, el herrero enano, encuentra una llave. Quizás nos permita entrar en algún edificio.

Este juego tiene un sistema de «subida de nivel» que va por colores: azul, amarillo, naranja y rojo. Cada personaje empieza siempre en azul con sus habilidades básicas y según va matando zombis, cogiendo objetivos o usando ciertos objetos va subiendo de nivel y adquiriendo nuevas habilidades. Pero claro, a más nivel tengas más difícil son los encuentros así que lo interesante es ir subiendo a todos más o menos a la vez o lo pasarás mal.

La habitación era pequeña pero estaba repleta de objetos útiles aparte de la llave necesaria para seguir avanzando.
Dos «gordos» hacen su aparición cerca de los aventureros.

Esta primera aventura no te da a elegir diferentes caminos o posibilidades para acabarla con éxito. Sólo hay un camino y no pueden aparecer ni el nigromante ni la abominación, cosa que se agradece.

Hay que avanzar porque si te entretienes en un sitio varios turnos buscando lo más probable es que se acumulen demasiados enemigos y seas su menú del día. Así que mientras unos iban y abrían puertas y exploraban zonas, dejé atrás a Samson el enano que con su martillo básico era el único que podía matar «gordos» y a Silas el elfo para acribillar a distancia a los zombis normales de retaguardia.

La puerta azul ya está abierta.
La hermana Ann carga contra el zombi.
Samson no tiene tiempo de huir al edificio, así que decide hacerle frente a los muertos vivientes.
Samsom enfrentado a dos enormes zombis y, ¡vienen más!

Ahora el objetivo era avanzar más o menos rápido por el edificio ignorando a los zombis que aparecían por el «spawn» que teníamos a nuestras espaldas.

La pena es que aunque aprovechaba lo que podía para buscar en las habitaciones, incluso por eso me comí una emboscada, no tuve suerte para encontrar buenas armas. Con los normales y los «corredores» no hubo mucho problema pero el único que podía matar «gordos» era el enano con su martillo de herrero.

¡Sorpresa para Nelly la posadera! A veces buscar en los edificios es perjudicial para la salud.
Ann derriba la puerta y al ver al enemigo en la habitación, decide esperar refuerzos.
¡Samson el herrero enano ha llegado!
Silas acribilla a todo ser no viviente que aparece por esa calle.

Después de algunos combates y más búsqueda, por fin llegamos al final del edificio donde se encuentra la trampilla.

Las trampillas en este juego son zonas especiales donde encontrar armas poderosas y llevan a otro lugar del tablero. En el juego básico vienen dos zonas de trampilla, una morada y otra amarilla, y dos armas especiales que deben colocarse al azar. En este caso por ser el tutorial, no hay armas.

Samson arranca la puerta de un martillazo y le sale al paso un solitario «corredor». El enano sonríe.
El grupo avanza hasta la zona de la trampilla.

Ya una vez atravesada la zona de la trampilla el objetivo era salir a buscar la llave que abre la puerta verde. El problema es que justo cuando se encuentre la llave, empezarán a salir zombis por la zona de aparición verde, justo al lado de la salida.

¡Y no podemos entretenernos mucho que por detrás se acercan enemigos!

El grupo sale a la calle para buscar la llave que los lleve a la salida.
Los enemigos que han dejado atrás los van persiguiendo.

Al final hubo suerte. Se encontró rápido la llave y no salieron muchos enemigos por lo que pudimos acabar con ellos rápido antes de que nuestros perseguidores nos dieran caza.

Entramos en el edificio de «Exit» que contenía un portal para poder huir y seguir luchando otro día. Nada más.

Justo al coger la llave nos apareció una enorme, pestilente y putrefacta criatura.
Al abrir la puerta aparecen dos figuras dispuestas a atacar al enano.
Ann carga con su espada y su daga y de dos certeros golpes acaba con los no muertos.
Los zombis nos pisan los talones.

Fue una partida sencilla y entretenida de más o menos una hora de duración, incluso mirando alguna que otra regla dudosa. Las reglas de este juego son sencillas y si le tengo que poner un pero a este título es:

1 – Hay que jugar sí o sí con seis personajes. Aunque juegues en solitario tienes que jugar con seis y eso conlleva problemas de espacio en mesa y gestión de personajes. Aunque no es complicado hacerse cargo de varios, puede pasar que se te olvide usar alguna habilidad o algún objeto entre tanta carta. Ojo, si tienes expansiones puedes jugar con más de seis personajes (hay reglas para ello). Debe ser una locura.

2 – La suerte. Hay demasiadas cosas que dependen de la suerte y le quitan cierto puntillo temático al juego. Me encanta que las zonas de aparición se juegue con la suerte y el nivel de tus personajes para ver qué sale pero hay algunas situaciones que me han sacado de la partida, como por ejemplo abrir puertas. Me ha pasado que al intentar abrir una puerta he llegado a fallar las tiradas hasta con cuatro personajes (cada personaje con sus tres acciones de abrir) y te quedas pensando si la puerta es de adamántium o qué. Y también te puede pasar cuando no tienes armas muy buenas, por ejemplo las básicas que necesitas un 4 para golpear, y atacas a un zombi normal con tus tres ataques y fallas, fallas y fallas como si el zombi fuera un ninja.

Aún así Zombicide: Black Plague es un juegazo para disfrutar en solitario o con amigos.

Seguiré subiendo la campaña…

El grupo de supervivientes ha escapado esta vez para luchar un día más.

2 comentarios sobre “Danza Macabra

    1. Si. La estuve pintando hace ya tiempo. No me gustó y no la terminé. Y ya se va a quedar así porque mi vista no está para pintar miniaturas. Incluso me compré unas gafas de esas tipo lupa y siempre las usaba pero ahora se me cansa la vista con un rato pintando.
      El sistema de nivel está muy bien. Cuanto más subes más difícil se pone pero más poderoso eres. Está muy bien balanceado.

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